Woodstock 1969

El que es el festival de música por antonomasia, se celebró los días 15, 16 y 17 de agosto de 1969 en el pueblo de Bethel, EE.UU.

La idea partió de dos jóvenes hippies: Michael Lang y Artie Kornfield, el mánager del grupo Train y productor del Miami Pop Festival y el Vicepresidente de Capitol Records, respectivamente. Ambos imaginaron un festival inmenso en la zona de Woodstock, donde se habían instalado músicos del momento como Jimi Hendrix, Janis Joplin, Van Morrison, Bob Dylan o The Band en busca de la esencia, de los orígenes y la naturaleza. A Lang y Kornfield, de 24 y 25 años, se unieron posteriormente los adinerados John Roberts (26) y Joel Rosenman (24), y los cuatro fundaron la compañía Woodstock Ventures, Inc., cuya principal finalidad era conseguir fondos para montar un estudio discográfico.

Tras la oposición local de que un evento así se llevase a cabo en el pueblo, el concierto fue prohibido por las autoridades de Woodstock sólo 30 días antes de su celebración, así que el legendario festival acabó haciéndose realidad gracias a que un joven llamado Sam Yasgur (abogado en la actualidad) convenció a su padre Max de que alquilase a los cuatro jóvenes su granja familiar, situada en la localidad de Bethel, Nueva York, a unos 60 kilómetros de Woodstock.

Las expectativas de la organización pasaban por acoger a unas 50.000 personas, pero la realidad, como todo lo que sucedió durante los tres días de conciertos, sobrepasó cualquier estimación: aunque durante los días previos se vendieron 186.000 entradas, se habla de que asistieron alrededor de 500.000 personas, y que un cuarto de millón se quedó en el camino.

Todo se colapsó. No había carreteras ni servicios de urgencia. Llovía a cántaros la mayor parte del tiempo, y luego venían horas de un agobiente sol de justicia, que empeoró los abundantes cuadros de neumonía consecuencia de las tormentas. Había un baño para cada 800 personas y un médico para cada 7.400. Se quedaron sin agua y sin comida. Tuvieron que recibir provisiones enviadas en helicópteros, preparadas por monjas de conventos y comunas vecinas.

Pero muchos todavía pagarían por poder haber estado allí.

Si pinchas en el cartel que encabeza el post puedes ver los los artistas que participaron. Entre los que conozco, están Joan Baez, Santana, Canned Heat, Janis Joplin (que murió igual que Hendrix poco más de un año después), Sly & The Family Stone, Grateful Dead, Creedence Clearwater Revival, The Who y Jefferson Airplane, con una de las actuaciones más memorables que finalizó con el tema White Rabbit. También estaba un jovencísimo y entonces casi desconocido Joe Cocker, u otros como Johnny Winter o Jimi Hendrix, que insistió en tocar en el último lugar.

Aunque se les ofreció participar, The Beatles no actuaron en Woodstock porque la organización no accedió a la imposición de John Lennon de que actuase también la banda de Yoko Ono (como siempre, la japonesa haciendo amigos...).

The Doors dijeron que no porque a Morrison no le gustaba tocar al aire libre, y los Led Zeppelin temieron pasar demasiado desapercibidos entre tanta estrella. Bod Dylan se cayó del cartel después de que su hijo cayese enfermo, y también un poco mosqueado porque vivía cerca de la granja, y los días previos sufrió la invasión en su casa de cientos de hippies buscando techo, supongo que eso le quitó las ganas de fiesta...

Igual que he querido evitar las manidas imágenes de Jimi Hendrix o Janis Joplin en concierto, tampoco voy a hablar de los consabidos tópicos del festival, como que batió records de consumo de marihuana y LSD, o que se convirtió en un despiporre sexual inenarrable, pero sí dar un par de trazos del momento histórico que probablemente fue la causa directa de que se convirtiese en el evento de celebración hippie por antonomasia.

El año anterior, 1968, conoce una serie de movilizaciones sociales sin parangón. Desde Ciudad de México, donde poco antes de los Juegos Olímpicos tuvo lugar la Matanza de Tlatelolco, una masacre de obreros y estudiantes, hasta el Mayo Francés, pasando por la Primavera de Praga o por una Italia en la que latían de forma visceral los dos extremos del arco político. Y en los Estados Unidos la cosa no estaba menos movida. Ese 1969, año en el que el hombre puso por primera vez un pie en la luna, la CIA entra a sangre y fuego contra los Panteras Negras llevándose por delante a sus principales dirigentes. La Guerra de Vietnam, que se prolongaba desde finales de la década anterior, es fuertemente contestada entre la juventud estadounidense. Además, los veteranos que regresan y cuentan lo que allí sucede, a menudo reciben la incomprensión de una sociedad que no quería creer lo que sus militares estaban haciendo en el otro extremo del mundo.

Por último y no menos importante hay que recordar a los hippies. Durante los últimos años 60 surge este movimiento contracultural que habla de amor libre, paz, respeto a la naturaleza, derechos humanos, etc., y que encontró en este espectáculo musical el aglutinante perfecto, una atmósfera pacífica en plena Era de Acuario que cautivó a toda una generación de tal forma que lo transformó en un icono de la historia moderna.

Curiosidades:

- El cartel fue diseñado por Arnold Skolnick, quien originalmente dibujó una flauta en vez de una guitarra.

- El precio de la entrada para los tres días fue de 18 dólares por adelantado (unos 75 euros de la actualidad), y 24 en taquilla.

- El pueblo de Bethel registraba en aquel entonces menos de 2.400 habitantes.

- Su lema fue "tres días de paz y música".

- Durante el festival murieron 3 personas: una por sobredosis de heroína, otra por apendicitis, y otro, un joven de 17 años, al ser arrollado por un tractor mientras dormía dentro de un saco.

- Tras el cierre de algunas de las carreteras que conectaban con la granja, y las retenciones de hasta 30 kilómetros, miles de personas tuvieron que hacer 24 kilómetros a pie, la mayoría desde la localidad de White Lake.

- Se escaparon de la granja 450 vacas, que camparon a sus anchas por el recinto durante los tres días.

- 346 policías renunciaron ante el panorama visto durante el primer día.

- Debido a los atascos, los artistas no llegaban a tiempo a la granja, por lo que el primero en actuar, Richie Havens, tuvo que tocar durante tres horas seguidas, hasta que un helicóptero alquilado a las Fuerzas Armadas, el único disponible, llegó con refuerzos musicales. Un helicóptero militar salvó el día para un público eminentemente antibélico.

- Dos bebés nacieron durante el evento, uno en un coche y otro en uno de los helicópteros, y se produjeron cuatro abortos involuntarios.

- A pesar del pitote, el festival es conocido por no registrar peleas ni incidentes violentos mencionables.

- Se realizó un famoso y económicamente provechosísimo documental sobre este concierto, dirigido por Michael Wadleigh y montado por Martin Scorsese. Fue estrenado en 1970 y ganó el Oscar al mejor documental. Recibió el título de "culturalmente significativo" por la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos y fué seleccionado para su conservación en el National Film Registry.

Y yo creo que ya está bien, ¿no?, que ya le estoy cogiendo rabia al festival de los... Quedan en el tintero las pérdidas económicas, la historia del documental, los cabreos entre los organizadores, las siguientes ediciones del festival, los míticos baños en pelotas en el lago de la granja... Aquí puedes ver un montón de imágenes buenísimas, en youtube están colgadas todas las actuaciones, aquí puedes ver la finca en la actualidad, y aquí puedes ver un vídeo con un montón de imágenes de esta guarrada monumental, digo de este festival. Y yo me quejaba del Viñarock...