lunes, 15 de marzo de 2010

La enana



Han pasado ya casi dos semanas desde que la enana nos dejó tirados como colillas, en una casa vacía y silenciosa que todavía hoy se nos viene encima, llena de rincones que ahora parecen no tener demasiado sentido.

Han sido días muy tristes, pero al mismo tiempo muy dulces, muy puros. Días de hablar despacito, días llenos de recuerdos, lágrimas, sentimientos nuevos y arrumacos.

Llevo días para contároslo pero no sabía muy bien cómo. Los primeros borradores eran mucho más melodramáticos, entrando en detalles de cuánto y de qué manera notamos su ausencia en nuestra rutina diaria y en cada una de las esquinas de la casa. Así que daos con un canto en el pecho, que esto es lo menos cursi que puedo ponerme.

Ahora solo me queda mimar y dejar que me mime el padre de la criatura, y agradecer todos estos años llenos de momentos inolvidables que nunca hubiese podido imaginar antes de que el cacho carne peludo éste nos conquistase.

Que mira que era bonita, la jodía.

6 comentarios:

El mejor profeta del futuro es el pasado dijo...

Ánimo, lo que cuenta es la cantidad de momento felices que os habrá echo pasar... con eso es con la que hay que quedarse, con una eterna sonrisa hacia ella!

balutxillo dijo...

Es una pena, yo también lo he vivido y se les coge cariño, ánimo.

Anónimo dijo...

Joder tía, se me saltaron las lágrimas.
Llevo un tiempillo mirando el blog intentando adivinar cómo estabas porque la verdad no me atrevía a llamar. Besotes a los dos.

Expresidenta.

Anónimo dijo...

LO SIENTO MUCHO CIELO. GRACIAS POR COMPATIR ESTE MOMENTO CON NOSOTROS, CON TODOS LOS QUE LOS QUEREMOS Y LA QUEREMOS, POR DARNOS LA OPORTUNIDAD DE DESPEDIRNOS Y ENCENDERLE UNA CÁLIDA VELITA. BESOS INMENSOS AMIGOS, BESOS ETERNOS QUERIDA FLACU PELUDA

Guayarmina dijo...

grande homenje!!

besotes amores!!

Alabinbonban dijo...

ay! que os como a todos! ñam!