martes, 20 de enero de 2009

Spencer Elden se moja



El Nevermind de Nirvana (1991) fue el segundo álbum de la banda de Seattle, que revolucionó a toda una generación (me consta), que enloqueció fanática escuchando el Smells like teen spirit, un tema que batió récords en las listas de la época, que puso a nuestras madres de los nervios, y que nos hizo entender qué era aquello tan cool del grunge y del rock alternativo... 

La portada, que es a lo que voy, se convirtió en todo un clásico, y muestra a un bebé de apenas cuatro meses de vida, que intenta, desnudo, atrapar un billete de un dólar sujeto de un anzuelo. 

Viendo en la tele un reportaje sobre partos en el agua, al grupo le pareció genial la idea de una imagen así para la portada del disco, que significara nacimiento y alternativa a un mismo tiempo. 

El diseñador buscó una foto de partos acuáticos que les pudiera servir, pero todas las que encontraba eran demasiado explícitas. Así que, por 200 dólares, contrataron al fotógrafo Kirk Weddle, que eligió como plató una escuela de natación, el Rose Bowl Aquatic Center de Pasadena, California, y pidió a sus amigos Renata y Rick Elden que le alquilasen a su recién nacido. Muy pocos habían oído hablar de ese grupo de peludos desarrapados que se hacían llamar Nirvana, así que nadie se esperaba por aquel entonces todo lo que ocurriría después, como el hecho de que en pocos días arrancaran al Dangerous de Michael Jackson del número 1 de las listas de éxitos, que en menos de seis meses obtuvieran un triple disco de platino, o que ocupe el puesto 17 en la lista de la revista Rolling stone de los 500 mejores álbums de la historia... Hoy, seguro que muchos padres pagarían por que su hijo pudiese ser inmortalizado protagonizando la portada de un clásico como éste. 

Fue después de haber realizado la foto cuando se les ocurrió primero lo del anzuelo, luego lo del billete, así que ambos fueron superpuestos en la fase de postproducción. 

Cuando el LP salió a la venta, muchos censuraron la portada, tachándola de sucia y pedófila, y muchas tiendas llegaron a colocar pegatinas encima del pinganillo del bebé. Pero el índice de ventas les hicieron tragarse sus prejuicios... 

El bebé se llamaba, (y de hecho se llama, de ahí este post, que me pierdo...) Spencer Elden, y este verano cumplirá los 18... ¿Te sientes viejo, eh?. 


Spencer es a día de hoy un estudiante de bachillerato que trabaja en una tienda de zumos y que de mayor quiere ser piloto aéreo. Vive en California, se declara fan de los de Seattle, y recientemente ha sido entrevistado por la MTV, donde ha confesado tener la sensación de ser la estrella porno más grande del mundo... Spencer no pierde el tiempo y se deja entrevistar por las principales emisoras de radio y canales de televisión de su país, y por los cientos de chicas que se acercan a él atraídas por el morbo de sentirse más cerca de Nirvana. Según afirma el avispado chaval, para ligar utiliza fórmulas como ¿quieres ver mi pene por segunda vez?... De hecho cuenta cómo una vez una mujer le propuso darle dinero para que nadase en su piscina, sólo por el mero hecho de que fuese el Nirvana baby... 


En el décimo aniversario del Nevermind la revista Rolling Stone llamó a Spencer, que tenía entonces casi 11 años, para hacer la misma fotografía (pero esta vez con bermudas...). Utilizaron al mismo fotógrafo, le pagaron 140 dolares, y usaron un billete de 10 para la foto: 


Spencer volvió a salir en otra portada, la que ves abajo, un disco de un grupo llamado "The Dragon Experience", en 2003. 


Y ya está, ¿no? siento no poder contar nada más interesante como que el canijo se ha convertido en astronauta o que ha cambiado de sexo... Bueno, no sé si sirve, pero creo que una vez robó unas rayban de una gasolinera, pero no pienso revelar mis fuentes...

Este post es encargo del misterioso alabinbonbanero que se esconde (supongo) bajo el seudónimo Igor Cajones (si, éste es el tipo de público que tengo, qué se le va a hacer...).

Escucho Come as you are, tema incluido en el Nevermind

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